miércoles, 1 de abril de 2015

El mal alumno (Así o más directo)


¡Hey! tú, sí, ¡Tú! ¿Te has considerado siempre bueno? ¿Una persona que agradece los aprendizajes de las personas a quien admira, de las personas que han aportado algo significativo en la vida? ¿Consejos, palabras u orientaciones que de alguna manera han cambiado la manera de ver el mundo y además, han aliviado algún tipo de depresión que atormentaba el corazón? Te invito a realizar un auto-examen de conciencia, puede que lo necesites urgentemente.


No olvides de dónde vienes amigo/a mío/a, porque la ley del karma vendrá a ti, a cobrarte palabra por palabra, hecho por hecho, lágrima por lágrima, aflicción por aflicción, desvelo por desvelo y por partida doble, todas las religiones concuerdan en que se trata de la justicia divina, los no creyentes prefieren llamarle karma.

No importa qué tan bueno crean los demás que eres, no importa qué tan devoto te vean, si le haces daño a otra persona para justificarte, eres simplemente una mala persona. Las personas de bien no necesitan mal poner a los demás para ganar posiciones, las personas de bien se caracterizan por ganar lugares debido a sus acciones limpias y justas.

¿Tienes raspadas las rodillas por demostrar tanta devoción? No demuestres frente a otros lo falso que resulta tu vida, para justificar a Dios (o en lo que creas) por qué le hiciste tanto daño a los demás, ojo, el daño no radica solo en agresión física, son palabras, son comentarios, son actuares. ¿Por qué no enfrentar las cosas con la cara en alto y no tener que pasar cerca de  otros con la cabeza agachada por comentarios mal sanos que realizaste? ¿Por qué no ser directos y ahorrarse el hecho de salir por la parte de atrás de la vida de una o muchas personas?

La vida y Dios mismo se encarga de poner o quitar a personas de nuestro camino, pues por alguna razón nosotros somos una mala influencia y provocamos mala vibra en su vida o simplemente eres tú quien resultó nocivo/a o tóxico/a para nuestra salud social. El que caso es que haces más perdonando que haciendo público un conflicto que al parecer ni tú mismo has logrado superar, como resultado de que la única persona que pone limitaciones para cumplir sus metas, eres tú mismo. Evalúate, analízate y toma cartas en el asunto.


A los cómplices de esas personas me resta decirles: “no apoyen el hecho de dar mala fama a otros solo para conseguir migajas de amor falso, sólo porque tu no consigues aceptación y amor propio, tú no sabes si serás la próxima víctima de la persona a quien apoyas”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario